jueves, 15 de noviembre de 2007

Ultimando detalles del suicidio


Venga ya, hombre. Lo ominoso me saluda. Mi idea de mí mismo
se degrada hasta el punto de explicarse sólo con dos palabras: mierda e inútil. Sirve para algo una persona así. Mis cambios de ánimo son tan repentinos que me doy asco. Como marido soy un imbécil, como amigo un idiota, como empleado una mierda y como artista nulo. Lo bueno es que este blog no lo lee nadie. Lo bueno de planear un suicidio de alguien inpopular es que no le va importar a nadie, en todo caso alquien extrañará o dirá pobre idiota, imbécil, etc.-
Ay.... si no existiesen los analgésicos opioides ya me hubiese desganado tanto que no comería mas nada. Alegrìa alegrìa, como dicen las viejas. Alegría de qué? de vino, de porro, de qué?
Una mierda.

domingo, 4 de noviembre de 2007

Mis canciones apestan


Es triste cuando uno se cree que hace una canción que cree que está buena y después se dá cuenta que era una mierda. Lo lógico sería decir: -... mmm parece que está buena, pero seguro que va a quedar como el orto. La indiferencia (en este sentido) tiene dos lados, uno bueno y otro malo. El bueno es que como me importan tres carajo los temas, obviamente no me quedan registros de las grabaciones y los ensayos, etc. Lo malo es que poray cuando estás en la casa de algún amigo quizás te sacuda con algún tema tuyo y uno diga, nooooo que garrón pensé que no lo tenía nadie, y ahi están todas las partes desafinadas, la mezcla horrible, el sonido a batería sintetizada, todo lo uno no quería que existiese, pero en el momento me hacía ilusión. Es muy complicado, si tocás solo sos un papanatas que no tiene ni norte ni sur, y si tocás con mucha gente nunca se logra llegar a buen puerto, a menos que uno decida convertirse en un nazi asqueroso, lo cual trae por consecuencia que te quedes solo, y así todo. Mejor esperarse tranquilo a que llegué un jugoso contrato discografico, para rechazarlo al instante diciendo: -Gracias ché, pero no me dá la zaviola pa grabar un disco como vos querés. -y el tipo te dice:
-No, pero vos tenés que bailar nada mas.

jueves, 1 de noviembre de 2007

Malvenidos


Cuando todo es una mierda qué queda? Nada, me siento igual de idiota que siempre, no tengo dinero y soy un asiduo aficionado a los estupefacientes
Si no tengo ningún problema grave y me siento como el culo, que puedo esperar si dejo que esta ansiedad del culo me envuelva y me haga hablar, o mejor dicho, darle voz a palabras que huelen a diarrea, a putrefacción neurótica que se condensan en lo más idiota y mezquino de mi ser. Qué es esto? quedarme sin esposa, sin madre, sin amigos, sin mí (que soy una mierda y me odio). Al fin y al cabo nunca tuve nada y siempre fui una persona mala, y me voy a morir así todo asqueroso y repugnante. La gente diría: - que bueno que se murió ese hijo de puta, se sacaron un peso de encima, un peso que olía a mierda y a desconfianza.
Siempre consideré el desgano como parte fundamental de cualquier expresión artística, ahora el desgano se vuelve parte fundamental de mi estado de ánimo general, sin expresión sin arte. Dejar que los demás hablen en mi lugar y que digan todo con lo cual yo no estoy de acuerdo. Vamos, consigan trabajo, ganen dinero, crien hijos, hagan todo lo que yo no haría o no puedo hacer, pero hagánlo en mi nombre, en mi miserable nombre.
Si alguna vez fui hombre he dejado de serlo ultimamente. Me tomo un trago de Coca-Cola para no desmayarme mientras escribo esto. Siento hambre pero mi estómago rechaza los alimentos. La gente que te rodea te desprecia sin saberlo?
El silencio es la busqueda de lo que no está, el rítmico golpeteo de la cabeza de un autista contra la pared, la sangre que chorrea en los azulejos es la expresión y los pelitos que se quedan pegados con la sangre seca es el estilo. Tiene sentido sentirse así? Así de imbécil? No entiendo nada.
Se puede ser tan idiota? Entiendo menos que ayer.
Se puede ser tan mierda como para que los demás se crean que uno es copado cuando yo no me aguanto de tan basura que soy. Se puede ser así de inútil, creo que en la inutilidad está la escencia de mi ser. Me gustaría gritar hasta escupir sangre, pero me duele demasiado el estómago. Son las 8 de la mañana, llegué a Barcelona a las 6. Me voy a fumar uno, intentaré dormir un poco y si no, tengo dos tabletas analgésicos opioides. Hasta luego